CHOLULA.-
¡Oh, el rey ya viene, el rey ya viene! ¡Sonará la gran trompeta, y un rostro yo
veré! ¡Oh el rey ya viene! ¡Gloria a Dios! ¡Él viene por mí! Desde hace mucho
tiempo ha sorprendido la aparición de objetos desconocidos, personas declaran
haber visto en la atmosfera terrestre, tan reales han parecido, hay motivos de
persecución por distintos países por fuerzas aéreas para darles alcance y
descubrir sus secretos principalmente por Estados Unidos de Norteamérica,
declaraciones de personas acreditadas sobre este asunto y las profecías
bíblicas, Donald E. Kellon, director del comité nacional de investigación de
fenómenos aéreos de los EE UU., han demostrado que loso objetos desconocidos,
vistos por muchas personas, son vehículos interplanetarios tripulados por seres
dotados de una inteligencia superior a la nuestra, procedentes de otros mundos
habitados.
El proyecto
Magneto, creado en 1953por el gobierno canadiense, dirigido por Wilbert T. B.
Smith, el ingeniero Esteban Olivier, discurría que los supuestos tripulantes de
naves especiales deberían poseer cuerpos físicos diferentes y superiores a los
nuestros, relacionándolos con los cuerpos glorificados. Luego el fin cuando
entregue el reino al Dios Padre cuando haya suprimido todo dominio, toda
autoridad, y potencia, por todos los siglos debajo de sus pies, y cuando dice
que todas las cosas han sido sujetas a él claramente se exceptúa aquel que
sujetó a todas las cosas, y hay cuerpos celestiales, y cuerpos terrenales, pero
una es la gloria de las celestiales y otra la de las terrenales, uno es la
gloria del sol, otra la gloria de la una, y ora la gloria de las estrellas,
pues una estrella es diferente de otra en gloria, se siembra en deshonra,
resucita en gloria, se siembra en debilidad resucitará en poder, se siembra en
cuerpo animal resucitará cuerpo espiritual. Hay cuerpo animal, hay cuerpo
espiritual, el primer hombre es de la tierra terrenal, el segundo hombre, que
es el señor es del cielo, cual el terrenal, tales también los terrenales, y
cual el celestial, todos también los celestiales, he aquí os digo un misterio,
no todos dormiremos, pero todos seremos transformados, si por que es necesario
que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de
inmortalidad, 2. Co. 15-24, 27, 38, 40, 41, 49, 51, 53.
La llegada
sobre la tierra de cuatro criaturas venidas del espacio por medio de ingenios
metálicos, el profeta Ezequiel relata haber visto la “gloria del Señor”,
aconteció en el año 30, en el mes cuarto, a los cinco días del mes, que estando
yo en medio de los cautivos junto al río Quebar, los cielos se abrieron y vi
visión de Dios, en el quinto año de la deportación del rey Joaquín, a los cinco
días del mes, vino palabra de Jehová al sacerdote Ezequiel ,hijo de Buz, en la
tierra de los caldeos, junto al río Quebar, vino ahí sobre él la mano de
Jehová, y miré y he aquí venía del norte un viento tempestuoso y una gran nube,
con un fuego envolvente, y alrededor de él un resplandor, y en medio del fuego
algo que parecía como bronce refulgente, y en medio de ella la figura de cuatro
seres vivientes, y estas era su apariencia, había en ellos semejanza de hombre,
Ez. 1-1 al 5.
Lo que
Ezequiel tenía en mente que la gloria de Dios y acciones de salvación y juicio,
se presenta en el lenguaje y forma simbólicos, me llevó a la puerta, a la
puerta que mira hacia el oriente, y he aquí la gloria de Dios de Israel, que
venía del Oriente y su sonido era como el sonido de muchas aguas, y la tierra
resplandecía a causa de su gloria y el aspecto de lo que vi era como una
visión, como aquella visión que vi cuando vine para destruir la ciudad, y las
visiones eran como la visión que vi junto al río Quebar, y me postré sobre mi
rostro. Y la gloria de Jehová entró en la casa por la vía de la puerta que
daban al Oriente, y me alzó el espíritu y me llevó al atrio interior, y he aquí
que la gloria de Jehová llenó la casa, Ez. 43, 1 al 5.
Estruendo de
multitud en los montes, como de mucho pueblo;
estruendo de ruido de reinos de naciones reunidas Jehová de los
ejércitos pasa revista a las tropas para la batalla. Vienen de tierra lejana,
de lo postrero de los cielos, Jehová y los instrumentos de su ira, para
destruir toda la tierra. Is. 13-4 y 5. Porque he aquí que Jehová vendrá con
fuego y sus carros como torbellino, para descargar su ira, con furor y su
represión con llama de fuego, Is. 66-15.
Dios mío
ponlos como torbellinos, como hojarascas delante del viento como fuego que
quema el monte, como llama que abraza el bosque. Persíguelos así con tal
tempestad, y atérralos con tu torbellino, Sal. 83-13 al 15. Cuan gloriosa será
la mañana cuando venga Jesús el salvador. Los creyentes unidos como hermanos.
Bienvenida daremos al señor. Dios te
ama.
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