Home » , , » Pronto, Cesarán tus Penas

Pronto, Cesarán tus Penas

Written By Unknown on domingo, 23 de agosto de 2015 | 20:05



CHOLULA.- La muerte se aproxima velozmente a todos los mortales, mira, yo he puesto delante de ti hoy la vida y el bien, la muerte y el mal. Dt. 30-15. Mi redentor murió en la cruz, por pecadores todo él pagó, quien le reciba tendrá la luz, ya sus maldades Jesús  perdonó, que maravilla de gran amor, Cristo mostró por el pecador, “El que creyera, salvo será”. Goces eternos él disfrutará, nuestras vidas son de corta duración, hay necesidad de prepararnos para la eternidad, vivimos y no pensamos que un día moriremos tarde o temprano, ¡prepárate para un encuentro con Dios!

La epístola de Santiago afirma la superioridad de los valores espirituales tan comúnmente incumplidos, cuándo no sabéis lo que será el día de mañana, porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo y luego se desvanece Stg. 4-14. Acuérdate de tu creador en los días de tú juventud, antes que vengan los días malos, y lleguen los años de los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento. Ec. 12-1.

¿Qué harás, quién serás cuando seas mayor? ¿Qué aspiraciones y cómo vas a ganarte la vida? No eres el único, todos lo hemos pensado, por el momento piensas en divertirte, pasando buenos ratos acompañados con amigos de la misma edad, hombres y mujeres, planea bien tú futuro. Hay posibilidades de todo, elige lo que más te agrade y guste para el futuro, examina la senda de tus pies, y todos tus caminos sean rectos, no te desvíes a la derecha ni a la izquierda, aparta tú pie del mal, Pr. 4-26-27.

Al tomar decisiones correctas, tienes que saber hacia dónde te diriges, como padres dar buenos consejos a nuestros hijos será lo mejor, fíjate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia, Pr. 3-5.

Hay en la vida hay hijos arrepentidos expresando su pasado, al crecer en el barrio como todos en la localidad, no tan seguros cercanos a la ciudad principal de Cholula, soy el menor de tres hijos, mis padres no religiosos, desde que éramos pequeños no nos inculcaron ningún valor cristiano o de otra creencia, como adolecente empecé a tener amigos y amigas, sin que lo supieran comencé a probar las drogas, cervezas y pulque, yo sentía mi libertad, íbamos de pachanga en pachanga, nos acostábamos con cualquiera abusando de todo, alcohol y otras drogas, me sentía feliz pasar el tiempo con los cuates y carnales, disfrutando a lo máximo de esta vida. Todo esto era superficial, sentía soledad y vacío, a nadie le importaba lo que pasaba a  mi alrededor, a veces me deprimía, de niño yo conocía a un anciano en su propio negocio, respetuoso, cuando pasaba por su negocio y me veía, lo saludaba, a mis 17 años me sentía triste, este anciano un día me dijo -¿qué tienes? Algo te pasa, te veo angustiado, él era cristiano, me habló de Cristo, me invitó a asistir a su iglesia, le decía que si, más nunca asistí a su iglesia.

 Un día ya no soportaba lo que sentía, al fin acudí a la iglesia, me dieron la bienvenida, toda la congregación, me sentía mal, apenado, al encontrar en Jesucristo mi felicidad, ahora me case con una hermosa mujer cristiana, tenemos una niña y un niño, nuestros hijos, somos felices gracias a Dios.

Tú te acuerdas que Jesús por mi murió, en la cruz del Calvario, él sufrió, yo me acuerdo que él  murió, su espíritu entregó, pues por mí el señor murió. Yo me acuerdo que Jesús pagó por  mí, mi gran deuda, hoy estoy libre aquí, por la sangre de Jesús derramada en la cruz, redimido y salvo soy. El hombre, la mujer, al llegar a la edad senil, producto de la vejez, se aproxima el final de la vida terrenal, no habrá más ahí niño que muera de pocos días, ni viejo que sus días no cumpla, Is. 6 5-20.

De cierto, de cierto te digo: Cuando eras más joven te ceñías e ibas a donde querías, más cuando ya seas viejo, extenderás tus manos, y te ceñirá otro, y te llevará a donde no quieras, Jn. 2-18. Joven fui y he envejecido, y no he visto justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan, Sal. 37-25.

Estas palabras pertenecen a un hombre que padeció injusticias, vivió como fugitivo, buscando asilo, escondido en cuevas, este fugitivo fue David, su experiencia personal la describe elegido después rey de Israel, la mayoría de las personas no desean escuchar las palabras de amor, no quieren cambiar su modo de vivir, si está bien y de lo que está mal, el tiempo sigue adelante, del nacimiento existe la inevitable, la muerte, que será un hecho, Dios creó al hombre y a la mujer, con el deseo de vivir para siempre.


Todo lo hizo hermoso en su tiempo, y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios, desde el principio hasta el fin, Ec. 3-11. Yo me acuerdo que Jesús el pan quebró, a los suyos todos con amor lo dio, es su cuerpo, el señor, ya llevó nuestro dolor, pues para mí el señor murió. Dios te ama.
Share this article :

0 comentarios:

Publicar un comentario

 
Support : Creating Website | Johny Template | Mas Template
Copyright © 2011. El Quetzal - All Rights Reserved
Template Created by Creating Website Published by Mas Template
Proudly powered by Blogger