El Hábito no hace al Monje

CHOLULA.- Se escucha por ahí que la cloaca en el gobierno del Estado, en materia de seguridad pública, se ha destapado y cada día es más pestilente lo que va saliendo a luz pública. Empezaron con la detención de 2 altos mandos en la materia, uno de ellos Marco Antonio Estrada López, y de ahí le salpicaron al mero jefazo de la seguridad en Puebla, Facundo Rosas, quien cuando declaró “no me voy”, por el caso de la muerte del niño de Chalchihuapan, tenía el sustento para afirmarlo y demostrar que se quedaba ¿Será? Se escucha por ahí que ahora, no se sabe, si en verdad tiene nexos con el crimen organizado, y si su “patrón” lo habrá de sostener, ya que no solo es afecto a la ley bala, para aplicarla a niño o mujeres, sino además proteger a hampones quienes se dedican al robo del patrimonio de los mexicanos. Que por cierto, ese delito es reciente, más aún en Puebla, será cosa de unos 3 años ¿Será? Se escucha por ahí que cuando alguien se pelea con la cocinera, corre el riesgo de quedarse sin comer. Cuando se trata de él solo, no hay mayor problema, porque a tanta insistencia le mandaban su buena “chuleta” y todos contentos, pero cuando pro su proceder se afecta a terceros, es inadmisible, dejan de ser coherentes entre el decir y el hacer ¿Será? Se escucha por ahí que han descubierto a quienes hicieron la novena maravilla del mundo, El Chapo-túnel, y todo por un olvido, bien dicen que no hay crimen secreto. Dejaron una videocámara encendida y ahí se ven a los 7 enanos cargando las herramientas. De seguro a “Tontín”, personaje muy parecido a un ex presidente de la república, tenía que haber apagado la videocámara ¿Será? Se escucha por ahí que se acercan fuertes vientos y hasta huracanes en tierras poblanas. Empezaron por imponerle funcionarios a Tony Gali, quien diplomáticamente ha aceptado, total una cosa es tener el nombramiento y otra muy distinta poder ejercer el cargo, y vaya que en la actual administración estatal, se ha dado esta curiosidad ¿Será? Se escucha por ahí que en la administración de José Juan Espinosa, por el milenario municipio de Cholollan, las cosas no andan del todo bien, y es que como le han cerrado ya la llave de los recursos, pues simplemente no le está alcanzando ya el recurso para los proyectos. Si bien es cierto que está bajando recursos federales para la realización de algunas obras, la situación además de obligarlo a apretarse el cinturón, está aumentando los despidos del personal. Ah, como recuerdan aquellos meses a principio de año, cuando anunciaba que por mucho recorte, no tocaría la nómina, aporque el trabajador no tenía la culpa ¿Será? Se escucha por ahí que los detenidos, esos que usaban el uniforme de policía, no solo se conformaban con el robo y venta de combustible de PEMEX, sino además tienen en su haber la protección a los casinos, y antros en la zona conurbada, es decir resultaron ser todos unos “angelitos”, quienes por cierto aprobaron los exámenes de “confiabilidad”, de eso no queda duda, por sus patrones bien que confiaban en ellos, para llevar la “cuota” exacta y nunca les fuera a faltar algo. Se acuerdan de porque la administración pasada, corrió a uno de los jefazos, porque no le quiso atorar con “cuota” de 80 mil mensuales. Hoy en día, se asegura no hay nada de eso ¿Será? Se escucha por ahí que cuando un problema social se pone de moda un problema asocial no solo es noticia, sino hasta surgen las agrupaciones sociales, los defensores que se desgarran la ropa y hasta a la cárcel van a parar. Pasa el efervescencia y se le olvida, más el problema ahí sigue latente, porque en realidad  nadie hizo nada por solucionarlo. El caso del bullying, niños víctimas de las agresiones de sus compañeros han perdido la vida. Nadie hace nada al respecto, porque como son niños, ni siquiera el nombre del presunto homicida, se puede difundir ¿Será? Se escucha por ahí que en la feria del Molote, se establecieron precios topes, se colocaron los mismos a la vista de los clientes, pero algunos de esos comerciantes, quitaron la lista de precios, y abusaron en el cobro. Malo, realmente muy mal, porque el visitante con toda la razón se va más que enojado, y la publicidad que hace contra esos eventos, es mediática. Tal parece que para respetar acuerdos, deben tener a un policías tras de ellos. Abuuuuuuuuuuuuuuurrrrrrrrrrrrrrrrrrr.