Se dice que estar enamorado es uno de los estados más maravillosos del ser humano. Muchos coinciden y además, hay expertos que afirman que el amor puede provocar cambios físicos, de comportamiento y personalidad. ¿De qué se trata?
Diferente
personalidad. De acuerdo con una publicación de la revista científica Journal
of Neurophysiology, diversos psicólogos coinciden en que estar enamorado
conlleva diversos cambios fisiológicos, psicológicos y de comportamiento, como
tener mayor energía, motivación y objetivos de vida más claros, pero también
pensamientos y una atención constante sobre esa persona especial. ¿Te cuesta
trabajo concentrarte? ¡Tal vez estés enamorado!
¿Adicción?
Como lo menciona un artículo de la revista Psychology Today, el estar enamorado
dispara gran actividad en el área tegmental ventral del cerebro, lo cual
provoca la liberación de dopamina a los centros de placer cerebrales y los
placeres ¡pueden ser adictivos! Puede ser que por eso no dejes de pensar en
ella…
¿Por qué me
siento así? Como señala un estudio publicado en la revista científica
mencionada, muchos de los aspectos del comportamiento al estar enamorado son
¡similares a los que produce la cocaína! Euforia, energía excesiva, falta de sueño
y apetito, debido a las alteraciones que sufre el sistema límbico.
¡Parece que
me aceptan mejor! De acuerdo con otro artículo publicado en Psychology Today,
estar enamorado también hace que las áreas del cerebro relacionadas con la
ayuda a los demás y la empatía se activen. Seguro te ha pasado que al estar
enamorado, de manera extraña, más personas se acercan a ti.
El amor y el
estrés. De acuerdo con esta misma publicación, el estado de enamoramiento
estimula una mayor producción de la hormona norepinefrina, relacionada con el
estrés, que incrementa la frecuencia cardiaca y la presión sanguínea. ¿Crees
que estar “enamorestresado” podría impactar en tu vida cotidiana?
¿Por qué
hice eso? Psychology Today también menciona que al estar enamorados, sufrimos
una reducción en la liberación de serotonina, lo cual provoca estar en menor
control de uno mismo. Ello afecta la estabilidad emocional y puede llevar al
que “está en las nubes” a hacer cosas impredecibles.
Soy un
superhéroe. La corteza prefrontal del cerebro es nuestro centro de razonamiento
y control. La amígdala, por su parte, es un componente cerebral que responde a
las amenazas, pues resulta que al estar enamorado ambas entidades disminuyen su
actividad. Por lo tanto, el enamorado corre más riesgos y es más valiente.
¿Peligro?

¿Con los
pies en la tierra? Estar enamorado se puede convertir en una experiencia
increíble. Se dice que es un sentimiento imposible de controlar y que sin duda
hay que disfrutarlo, pero ¿crees que sea fácil convertir los efectos físicos
del enamoramiento en actitudes que impacten de manera positiva a todo lo que te
rodea? ¡Dinos tus experiencias!
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