Carta de un Lesionado…

CHOLULA.- Yo no tengo el gusto de conocerte, y probablemente tú tampoco me conoces, pero dentro de muy poco tiempo, no sé cuánto, podríamos estar involucrados en el mismo problema… Es por eso que te escribo estas líneas, poniéndome en contacto contigo para poder expresar lo que siento; tal vez dentro de muy poco me encuentre muy grave, si no es que muerto. Es urgente que te des cuenta de mi situación pues tú también te encuentras en ella, o tu hermano o el mío o mis padres o mi amigo... no sé.

Dentro de unos momentos sufriré un accidente, tal vez un ataque al corazón o una hemorragia cerebral, mi casa podría quemarse o derrumbarse o un automóvil se me vendrá encima al cruzar la calle, mi cráneo estará fracturado, así como mis costillas, mi columna vertebral y quizás tendré una pierna amputada, pero mi corazón podría seguir latiendo...unos minutos más ansioso de tu llegada.

De una cosa puedo estar seguro, ¡Yo no quiero morir todavía! Y no porque le tenga miedo a la muerte; mis hijos esperan que los vea crecer, aún no he alcanzado mis metas... en fin...yo sé que tú me entiendes.

No sé cuánto tiempo pase hasta que tú me encuentres, quizás me hayan dado por muerto o me encuentre en la lista de desaparecidos, pero quiero que sepas, que confió en ti; mi cuerpo mutilado e irreconocible, casi sin vida está en tus manos, no descuides mi corazón pues quizás se detenga una o más veces.

Eres el único ser humano que tendré cerca en ese momento.

Tus manos serán las únicas disponibles para presionar mis heridas y que dejen de sangrar, a nadie podré acudir sino a ti.

Independientemente de que sobreviva o no a esta pesadilla que me espera, quiero hacerte llegar mi agradecimiento con esta carta. A nombre de la humanidad, y sobre todo...de aquellos que se encuentren en la misma situación que yo, te invito a prepararte y capacitarte, y por sobre todo seguir adelante con esta pesada carga que has tomado en tus hombros, sin que nadie te haya obligado.

Atentamente

Tu lesionado.