* Los
obispos mexicanos piden justicia por el asesinato del padre Gregorio López
PUEBLA.- Los obispos de México
lamentaron profundamente el asesinato violento del padre Gregorio López
Gorostieta, en Ciudad Altamirano, Guerrero.
A través de
la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), enviaron las condolencias a los
familiares y amigos del sacerdote López Gorostieta, deseándoles que pronto
llegue la resignación y los fortalezca con la esperanza.
Nuevamente
la CEM repitió su postura que ha mantenido desde hace meses “¡Basta ya!No
queremos más sangre, No queremos más muertes, No queremos más desaparecidos,
Exigimos a las autoridades el esclarecimiento de éste y de los demás crímenes
que han provocado dolor en tantos hogares de nuestra patria, y que castigue
conforme a derecho a los culpables”, expresaron los obispos de México.
Además
exhortaron a la población a comprometerse a ser agentes en la construcción de
un México justo, reconciliado y en paz.
Cabe recordar
que el sacerdote Gregorio López, fue secuestrado por un comando armado el
pasado 21 de diciembre en la carretera federal- Iguala – Ciudad Altamirano, a
la altura de Tlapehuala.
López
Gorostieta, fue encontrado el 25 de diciembre, en las inmediaciones de la
colonia Benito Juárez de Tlapehuala, si vida, fue estrangulado y le dieron el
tiro de gracia. El sacerdote tenía 39 años y era originario de Nachititla
estado de México.
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